viernes, 28 de septiembre de 2012
En esta farmacia NO: ¡por el derecho a decidir!
El 28 de septiembre se celebra desde hace años en América Latina el día por la despenalización del aborto. Este año por primera vez se va a relizar una jornada de lucha global por los abortos legales, seguros y accesibles en todo el mundo. De hecho, en un rato nos vamos a la concentración de puerta de Toledo, organizada por Feminismos 15M, para tratar de impedir que nos quiten unos derechos (ya suficiente mermados) que nos han costado tanto conseguir.
Más de 100.000 mujeres abortaron el pasado año por un embarazo no deseado en el Estado español. Pero frente a esta realidad, el Gobierno prepara un cambio de la ya limitada ley actual que volverá a introducir el aborto en el código penal español. Además de ser una medida clasista que discrimina a las mujeres con menos recursos, es una cuestión que atenta contra nuestra autonomía y libertad personal y nuestro derecho a decidir sobre nuestras propias vidas.
Además de acudir a las concentraciones, participar en las comisiones de feminismos de las asambleas de nuestros barrios, sumarnos a las luchas y activismo de organizaciones de mujeres, feministas, de salud, podemos hacer cosas desde el ámbito del consumo crítico.
Por ejemplo, seguro que os habéis encontrado con que pese a la venta libre, muchas farmacias camuflan su objeción a vender la píldora del día después (e incluso a veces los preservativos) alegando falta de stock. Incluso en algunas farmacias se puede ver bien grande un cartel explicando que por "razones morales" no dispensan la píldora. De momento y si el Partido Popular no lo cambia, la píldora debe facilitarse sin necesidad de prescripción médica a todas las mujeres que la precisen, independientemente de su lugar de residencia y en el plazo necesario para garantizar su eficacia (hasta 72 horas después de una relación sexual). Así que, por nuestras propias razones morales podemos explicarles a las o los dependientes de estas farmacias anti-elección que no volveremos a su establecimiento mientras sigan dificultando la accesibilidad a un medicamento que contribuye a la reducción de embarazos no deseados, sobre todoen jóvenes y adolescentes. Ni un ibuprofeno, ni una tirita. Yo sólo pienso comprar en farmacias dónde pueda encontrar información sobre cómo y cuándo emplear la píldora, sobre otros métodos anticonceptivos y sobre cómo prevenir infecciones de transmisión sexual y sobre todo dónde respeten mi derecho a elegir.
Seguro que faltan muchos más motivos, pero en este enlace encontrarás un decálogo de argumentos para este 28 de septiembre global por el derecho a decidir y tres vídeos que me han parecido interesantes para reflexionar:
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La farmacia de debajo de mi oficina tiene un cartel que apoya "el derecho a la vida" y criminaliza la píldora del día después, yo decidí hace tiempo no volver a comprar allí. Nuestro consumo nos empodera y nos posiciona, tenemos que elegir muy bien los lugares donde compramos y ser coherentes con nuestras ideas!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo! No siempre es fácil ser coherente pero mola tener el "chip crítico" en mente e intentarlo :)
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